Quienes realizan, con frecuencia, trail running recomiendan una serie de elementos que no deben estar ausentes en las carreras de la montaña. Para comenzar, elegir bien unas zapatillas para montaña que permitan un paso cómodo y la posibilidad de realizar movimientos en subidas y bajadas abruptas. Un buen calzado asegurará una buena pisada, sobretodo teniendo en cuenta los diferentes terrenos que pueden encontrarse arriba de la montaña: agua, hielo, hierba, rocas, entre otros.

Además, hay muchas más cosas que no pueden faltar. La ropa running debe ser cómoda y liviana, sobretodo si las temperaturas son elevadas. Se recomienda, con respecto a la indumentaria, llevar una chaqueta cortavientos porque en la montaña los vientos pueden ser muy fuertes.

En una mochila que se adapte bien al cuerpo, no puede faltar una buena provisión de agua y alimentos energizantes. En caso de que la carrera se vea interrumpida por diversos factores, se debe contar con agua y comida para evitar la deshidratación del cuerpo.

Para no perderse o salir del camino previamente establecido para la carrera, se debe llevar un mapa con el correcto registro y un GPS.

Y aparte de todos los elementos necesarios, se debe entrenar como corresponde y trabajar la concentración. Esta última es de suma importancia para evitar riesgos innecesarios y llevar una buena carrera, más allá del resultado. Tomarse el trail running como una aventura es primordial para que la experiencia sea positiva aunque se trate de una competencia donde gana el que primero llegue a la meta establecida.