La generación millennial es la que en un futuro muy cercano tomará el control económico, político y social de nuestro mundo. Ya se están incorporando al mercado laboral. Son jóvenes preparados, con mucho talento, pero que buscan en el trabajo algo muy distinto a lo que buscaban sus padres o abuelos, tienen un concepto integrado de trabajo y vida. Así, si una empresa quiere atraer este talento a su organización, no basta con ofrecerle un empleo, sueldo y seguridad. Necesita adaptarse a la nueva realidad y necesidades de los nuevos profesionales, los jóvenes. Según explica Carme Castro, coach y socia de Kainova, empresa especializada en la gestión de las personas, los candidatos a una oferta de trabajo poseen más conocimientos y están más preparados que generaciones anteriores, y la tecnología es una extensión de su propio yo, viven y piensan de forma diferente “No vamos a encandilarles vendiéndoles un tipo de contrato determinado, con un sueldo, cualquiera que sea, y una jornada laboral de más o menos horas. No podemos limitarnos a darles algo a cambio, hay que seducirles”. Para ello los procesos de selección y las entrevistas de trabajo tienen un enfoque radicalmente distinto. En cierto sentido, el candidato y la