Para poder aumentar la venta de un producto se realizan múltiples acciones. En general, los profesionales del marketing y de la publicidad idean un plan estratégico para lograr el objetivo de venta. Se pueden utilizar varias formas de publicidad, de a una o en forma simultánea. El soporte de los medios audiovisuales, si la empresa puede invertir, así como la utilización de las redes sociales es importante. No obstante, hay una forma directa de llegar a los consumidores dentro del mismo sitio de venta, y es a través de los expositores para tiendas. Se tratan de estructuras que se realizan en cartón u otros materiales livianos como el acrílico que permiten exhibir el producto a la venta en cualquier salón comercial. Estos soportes plv marcan una diferencia respecto a otras formas de publicidad, ya que permiten ese contacto directo entre la empresa por medio del producto y los consumidores.

Se deben buscar ideas llamativas tendientes a llamar la atención de los consumidores. Se debe lograr que no pasen desapercibidos y los clientes se acerquen a observar el producto de cerca. Una vez activada en ellos la necesidad de probar el producto, sólo queda pagarlo. Y como los expositores están en el lugar de venta, no hay más que hacer. Esta es una de las grandes ventajas que representan los expositores publicitarios: no obliga a los clientes a trasladarse a otro sitio para adquirir el producto. Esto permite que la necesidad del cliente no se pierda ni se enfríe con el paso del tiempo, y que la venta se cierre rápidamente.