• La empresa náutica cumple su objetivo de abrirse a nuevos mercados tras una ronda de financiación de 185.000 euros

• La elevada cultura náutica del país francófono aglutina 250 millones de euros en el mercado del chárter

Barcelona, junio de 2014.- La costa francesa es uno de los principales atractivos turísticos de este país. Su largo recorrido de más de 5.900 kilómetros de playas y calas está poblado por más de 1 millón de embarcaciones, lo convierte a Francia en un país perfecto para recorrerlo en barco.

“En el territorio francés hay una amplia cultura náutica, además de la cultura del P2P, más conocida como de particular a particular, que ha ayudado e incentivado el alquiler de embarcaciones”, explica Octavi Uyà, CEO de la empresa náutica Nautal.

Según estudios recientes, en 2013, se estima que en el territorio francés se generaron un total de 250 millones de euros que provenían del sector del chárter.

La expansión francesa

Considerando a Francia un país idóneo para la cultura del chárter y tras obtener una ronda de financiación de 185.000 euros con el objetivo de la internacionalización, la startup de alquiler de barcos Nautal ha decidido expandirse a este territorio. “Muchos turistas franceses se acercan hasta España para disfrutar de las playas y calas de una manera distinta y exclusiva como es en barco”, asegura Uyà.

A pesar de que su plataforma online lleva menos de 1 año en marcha, Nautal.es ha conseguido afincarse en el territorio español como una empresa referente en su sector. Su iniciativa e ímpetu junto a la transparencia y cercanía en el trato al cliente, han permitido a la empresa poder ofrecer a día de hoy un servicio de alquiler de barcos a precios razonable para disfrutar del mar desde cualquier punto del territorio español, desde las Baleares hasta Tenerife y, a partir de ahora, también en Francia.

Las facilidades legislativas que ofrece Francia en el ámbito de la náutica también han conseguido impulsar un mayor crecimiento en el sector. A diferencia de otros países, Francia es más permisiva con las titulaciones para veleros o el cambio de matriculación de los barcos si se quieren destinar al alquiler, ayudas que incentivan a los usuarios a lanzarse al mar y experimentar de primera mano lo que es navegar.