Cada vez son más los que buscan aprender a coser y a realizarse sus propias prendas. Después de la tendencia de la fast fashion, ahora llega un movimiento más sostenible basado en prendas clave que sirvan para fondo de armario y cuiden más la calidad de los tejidos y su confección para que perdure durante varias temporadas como ya se hacía a mediados del siglo pasado.

Para ello, la escuela de patronaje es una alternativa perfecta para formarse.

Auge en las capitales

Cada vez es más habitual ver cómo los jóvenes se acercan a la costura y consiguen, también así, un espacio de negocio disponible en las capitales. Pero, ¿por qué este nuevo renacer?

1. Revalorización de la moda artesanal y personalizada

El interés por la moda sostenible, el diseño a medida y la exclusividad ha llevado a un renacimiento de profesiones como el patronaje. Los consumidores buscan prendas únicas y de alta calidad, alejándose de la producción masiva, lo que abre oportunidades para los patronistas que trabajan con diseñadores, marcas locales y talleres artesanales.

2. Crecimiento de pequeños talleres en provincias

En las capitales de provincia, muchas pequeñas y medianas empresas han empezado a destacar en el sector de la moda. Estos negocios suelen demandar servicios de patronaje para desarrollar sus colecciones, lo que crea empleo local y fomenta la formación de especialistas.

3. Apoyo institucional y emprendimiento local

Muchos gobiernos locales y regionales están promoviendo el emprendimiento en moda a través de subvenciones y ferias de diseño. Esto incentiva a nuevos patronistas y diseñadores a establecerse en provincias donde los costos operativos son más bajos que en grandes ciudades como Madrid o Barcelona.

4. Auge del e-commerce y la producción local

El comercio electrónico ha facilitado que pequeñas marcas en provincias compitan en el mercado global. Estas marcas necesitan profesionales del patronaje para garantizar diseños bien estructurados y adaptados a las tendencias actuales.

Además, es una profesión en sí misma que abre las puertas a muchas salidas laborales que van desde la colaboración con diseñadores a ser el servicio de postventa de tiendas de ropa que necesitan pequeños arreglos o incluso al emprendimiento con patrones originales capaces de dar respuesta a la demana de pret-a-porter más exclusivo para los eventos de las fiestas provinciales. Además, el crecimiento logístico también demanda de perfiles capaces de realizar arreglos para las grandes marcas tal como explican desde la Escuela Superior de Patronaje.