El renting como forma de financiación que permite estar a la vanguardia de la tecnología médica sin grandes inversiones iniciales     Madrid, 24 de septiembre de 2015.- La tecnología está revolucionando la medicina. Y no solo porque cada vez se desarrollen más herramientas de forma artificial como los órganos artificiales, los chips que advierten de infartos o las extremidades robóticas, sino porque cada vez los profesionales médicos cuentan con más instrumental tecnológico para hacer sus diagnósticos y pruebas. En cierta forma, los facultativos corren el riesgo de convertirse en operarios de máquinas aunque siempre será imprescindible el criterio profesional y el ojo clínico. Hasta el fonendoscopio, símbolo de la medicina por excelencia, ha sufrido un cambio tecnológico, ahora los hay con ultrasonido y pantalla. El problema en muchos casos es su precio, pues un fonendoscopio de última tecnología puede costar hasta 9.000 euros, la ventaja es que además de oír los ruidos cardiacos es posible ver el movimiento del corazón. Si vamos a pruebas médicas más avanzadas, la tecnología y su precio es aún mayor por lo que actualmente la competitividad de las clínicas reside precisamente en la posesión de cierta maquinaria. Por ejemplo, una clínica de podología puede ganar prestigio y pacientes