El camino hacia una sociedad que se mueva a través de energías limpias se ha trazado en un proceso de transición energética en el que aún es difícil conseguir los objetivos fijados. Uno de los principales escollos es la inversión en proyectos de energías renovables, ya que con la que hay actualmente no se puede cumplir con la agenda fijada. La dependencia energética de fuentes de energía contaminante, como el gas o el petróleo, sigue siendo muy elevada, y aunque factores geopolíticos actuales la han reducido y han hecho que se dirija la mirada hacia energías limpias, la inversión no va en consonancia con la premura que imponen, por un lado, un posible y plausible desabastecimiento, y la emergencia climática, que se agrava año tras año. Desde la plataforma de financiación participativa Flobers creen que para acelerar la transición energética es indispensable democratizar la inversión en energías renovables, dando entrada a particulares y pequeños inversores que buscan rentabilidad para sus ahorros. “Solo de esta manera se podrá dar el paso definitivo hacia el autoconsumo, que es el objetivo final de este cambio de paradigma”, explica la CEO de Flobers, Diana Plané. El crowdfunding y el crowdlending son unas vías sencillas y abiertas a