La red de franquicias de escuelas de idiomas The Green Monkey ha abierto cinco nuevos centros, tres en Madrid y otro dos Barcelona. Con estas aperturas, la compañía ya acumula 15 establecimientos en toda España.

Los nuevos centros de Madrid están ubicados en la calle Príncipe de Vergara, 217; en Julián Camarillo, 50; y en Arturo Soria, 355. En cuanto a las de Barcelona, se trata de las primeras escuelas de la compañía en Cataluña. Estarán situadas en el Paseo Manuel Girona, 49; en pleno barrio de Sarrià; y la otra en la calle d’Aragó, 376 (Eixample).

Estas nuevas sedes son un paso más en el proceso de expansión que está acometiendo The Green Monkey en los últimos meses. De hecho está previsto que la red de franquicias amplíe su número de centros a más allá de la veintena antes de que acabe este año.

Todos los establecimientos de idiomas de The Green Monkey se caracterizan por impartir su revolucionario método 360º Real Learning. Esto quiere decir que reúne entre sus servicios soluciones para todos los sectores de la población: desde campamentos de verano y prácticas en empresas en el extranjero hasta cursos académicos de inmersión en idiomas, preparación de exámenes oficiales o formación en empresas. Todo ello, en grupos reducidos de no más de siete alumnos y divididos por niveles y edades. No solo en inglés, sino también en francés, alemán, portugués, italiano, ruso, chino y español.

El método 360º Real Learning  de The Green Monkey pivota alrededor de la figura del profesor, por lo que el proceso de selección al que se somete a cada uno de ellos es muy estricto. De hecho, el equipo docente no solo no solo son profesores nativos, sino que también son pedagogos.

En esta época del año, la gran apuesta de The Green Monkey son los campamentos de verano en Irlanda, donde se combinan los deportes (baloncesto, rugby, fútbol, equitación, surf, golf o tenis) con la enseñanza de inglés. Para otro tipo de público, también hay la posibilidad realizar acciones de voluntariado en países del Sudeste Asiático o en África; trabajar de au pair con una familia irlandesa o colaborar en una granja orgánica en Reino Unido.