El uso de sinónimos retrasa el Alzheimer

Muchas veces es habitual en las redacciones infantiles (y a veces en otras no tan infantiles) detectar reiteraciones de palabras que hacen que el texto sea pesado, difícil de leer y en algunos casos, hasta molesto. Hoy analizamos la importancia de conocer sinónimos. Estos ayudan a que nuestro pensamiento, además de ser más fluido, esté mucho más entrenado.

Independientemente de que se padezca Alzheimer usar sinónimos es positivo. Los sinónimos son palabras que aún teniendo una morfología o forma diferente o distinta, significan o refieren a exactamente lo mismo. Ésta oración anterior era un buen ejemplo de cómo los sinónimos pueden enriquecer una frase, una exposición y por supuesto, nuestro cerebro.

Los sinónimos son vías alternativas al pensamiento. Cuando una persona repite reiteradamente una palabra, una expresión o una coletilla, nuestro cerebro reacciona negativamente ante el discurso. Esto es   porque lo considera falto de forma y por tanto, inconscientemente, genera un repudio en lo más hondo de nuestro cerebro que hace saltar el resorte de la desconfianza.

El uso fluido de sinónimos permite a los seres humanos reiterar una idea sin que parezca repetitiva. Es importante indicar que un uso óptimo de los sinónimos puede elevar un discurso textual hasta cotas insospechadas. La riqueza literaria convence, mientras que la repetición genera suspicacias entre el respetable.

Los sinónimos y el Alzheimer

Pero ¿y qué relación tienen los sinónimos y la salud? Muy simple. Los sinónimos suponen, como ya hemos dicho anteriormente, vías alternativas. A veces son resquicios para la huida y en según qué ámbito, pueden ser la diferencia entre “perder o ganar” una discusión. Eso hablando de un nivel básico de la salud del ser humano. Es decir, la salud mental durante y después de una conversación independientemente del tema. Pero por encima de todo, el uso y conocimiento de un rico arsenal de sinónimos está demostrado que  retrasa el Alzheimer.

La relación es simple. Las ideas de nuestro cerebro están basadas en la potencia de las conexiones internas que éste tenga o pueda configurar. Por tanto, el aprendizaje de diferentes palabras asociadas a una misma idea hace que esas conexiones se multipliquen y se hagan cada vez más fuertes. He ahí la relación con el Alzheimer. Por ello, siempre en casa es recomendable que se tenga al lado del diccionario, un buen diccionario de sinónimos.

Enriquecer el discurso o mejorar nuestras conexiones mentales. También nuestras capacidades cognitivas y retrasar el Alzheimer. Todo son ventajas. ¿Cómo alguien puede no querer usar sinónimos sabiendo todo lo que hacen por nosotros?

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