Protagonizado por los habitantes de Salinas de Añana en las propias eras, se celebrará este sábado 7 de julio a las 22:30 horas. La programación del fin de semana incluye, además, feria artesanal, visitas teatralizadas, exhibición de danzas, pelota, bolos, y comida popular.

La localidad alavesa de Salinas de Añana celebrará el próximo fin de semana, los días 7 y 8 de julio, la Feria de la Sal, un acontecimiento dirigido a poner en valor la recuperación que se está llevando a cabo en el Valle Salado. Entre los actos, organizados por la Fundación Valle Salado con la colaboración del Ayuntamiento de Añana y la sociedad de salineros Gatzagak, destaca el espectáculo de luz y sonido “La memoria del Valle”, que tendrá lugar el sábado día 7 a las 22:30 horas (entrada a partir de las 22:00 horas).

En “La memoria del Valle”, voluntarios de la localidad encarnan, en las propias eras, a las personas que desde la Prehistoria hasta la actualidad, pasando por el Imperio Romano y la Edad Media, han mantenido la historia y tradición salinera del Valle Salado. El espectáculo, que dura una hora, narra la vida de un salinero que creció lejos de Salinas al decaer la actividad salinera. Al conocer la noticia de que el Valle Salado es candidato a Patrimonio Mundial de la Unesco sus recuerdos afloran y regresa para recorrer las sendas que marcaron su infancia.

“Se trata de un espectáculo único y totalmente distinto a lo que estamos acostumbrados, porque en él participan los propios vecinos de la localidad. Ellos son los protagonistas y recrean con pasión el pasado, el presente y el futuro de un paisaje cultural como el Valle Salado que ha vivido épocas de esplendor, etapas de olvido y deterioro, y momentos, como ahora, en los que resurge la ilusión y el esfuerzo por recuperarlo”, explica Roberto López de Eguílaz, director gerente de la Fundación Valle Salado de Añana.

La Feria de la Sal arrancará el sábado por la tarde con exhibición de danzas, campeonato de bolos y música en directo. Tras el espectáculo, tendrá lugar un concierto en la plaza de Salinas. El domingo por la mañana las calles del pueblo acogerán la feria artesanal y las visitas teatralizadas. Los campeonatos de pelota y bolos servirán de antesala a la comida popular.

La entrada para el espectáculo “La memoria del Valle” cuesta 10 euros, en el caso de adultos (incluye pintxo-pote), y 5 euros para menores de 12 años. Con menos de 3 años y que no ocupen asiento podrán acceder gratis.  Las entradas sin asiento cuestan 5 euros y para menores de 12 años, 2 euros. Como en ediciones anteriores y por aforo limitado, se recomienda reservar entrada (945 35 14 13 o en el Centro de Visitantes del Valle Salado).

Durante todo el fin de semana, el Valle Salado de Añana reforzará su oferta de visitas guiadas para atender la demanda. Los visitantes del domingo día 8 tendrán entrada a precio reducido.

Acerca de: www.vallesalado.com       

Valle Salado, declarado Monumento Histórico Nacional en 1984 y en proceso de convertirse en patrimonio dela Humanidad, se emplaza sobre uno de los fenómenos más curiosos de la geología, el Diapiro, ya que la salinidad del entorno hace que su ecosistema sea único. Entre los últimos ‘proyectos de Valle Salado destacan los proyectos de restauración de diversas zonas de las salinas; el inicio de la comercialización de sal gourmet (www.saldeanana.com); la construcción de un Spa Salino al aire libre; la creación de un Centro de Acogida a los visitantes; la construcción de un escenario y un graderío para albergar espectáculos y la puesta en marcha de Programas Anuales de Visitas Guiadas al Valle Salado, entre otros.

The Salt Valley of Añana (Salinas de Añana, Basque Country, Spain) is one of the most spectacular and best preserved inland saltworks. Its value not only lies in its particular architecture or on its almost 1.200 years of documented history, or even in its geological features, biodiversity or landscape values, but in the union in perfect harmony of all of it in a privileged context.

El Valle Salado de Añana (País Vasco, España) es una de las salinas más espectaculares y mejor conservadas del mundo. Su valor no sólo reside en su arquitectura particular de terrazas imposibles construidas con piedra, madera y arcilla, o en sus características geológicas, su biodiversidad o los valores únicos de su paisaje, sino en la unión en perfecta armonía de todo ello en un contexto privilegiado.

La excepcionalidad de este paisaje cultural industrial vivo con más de 1.200 años de historia documentada, unido al proyecto de recuperación que está llevando a cabo sin ánimo de lucrola Fundación Valle Salado, hacen que las salinas sean un Monumento Histórico Nacional y estén en trámites de convertirse en Patrimonio Mundial de Unesco.