Fast Fuel, la cadena de gasolineras low cost, ha presentado su ambicioso plan de expansión a través del sistema de franquicias. La compañía prevé finalizar el año con una red de 7 estaciones de servicio operativas, 6 de las cuales ya están en la última fase de construcción.

La compañía emprende esta iniciativa tras la experiencia adquirida con una unidad operativa propia, que puso en funcionamiento hace dos años, tras la liberación del sector de los hidrocarburos.

Esta nueva normativa, que da vía libre a la explotación de los puntos de suministro de combustible sin necesidad de estar bajo el paraguas de las grandes petroleras, ha abierto una interesante oportunidad de negocio para nuevos inversores que buscan entrar en un sector hasta ahora controlado por los grandes operadores.

Se trata de un modelo de negocio diseñado en base a un nuevo concepto de gasolinera, que surge con el objetivo de ofrecer un combustible de máxima calidad a un precio muy competitivo, aproximadamente en 10 y 12 céntimos más barato por litro.

Para ello, Fast Fuel ha desarrollado un innovador sistema de gestión, repostaje y telemática que permite reducir los costes para bajar el precio de la gasolina y de manera directa incrementar las ventas y el índice de rentabilidad.

Otro factor que ha influido en esta reducción de costes es el modelo establecido, que minimiza los gastos de estructura mediante un prototipo de gasolinera autoservicio, que no requiere la contratación de personal, además de importantes acuerdos con empresas y proveedores de primer nivel para proporcionar un alto margen de beneficios, al mismo tiempo que garantiza el mejor servicio a la red. Y, por último, una ley aprobada en Consejo de Ministros en febrero de 2013 por la cual se permite que casi cualquier parcela industrial o terciaria sea apta para albergar esta actividad.

Fast Fuel presentará su modelo de negocio en la próxima edición de Expofranquicia, que se celebra en Madrid entre el 20 y el 22 de abril, donde los interesados podrán conocer en primera persona todos los detalles para entrar a formar parte de la empresa.

En pleno crecimiento de la economía, la marca se presenta como una interesante oportunidad para empresas, inversores, emprendedores en un sector en el que antes era muy complicado entrar y que a partir de ahora con el respaldo de Fast Fuel se puede instalar de manera rápida y sencilla con la menor inversión del mercado.

Para cubrir los diferentes perfiles de franquiciados la compañía ha establecido varios niveles de franquicia cuya inversión parte de 189.000 euros, con una superficie mínima de 200 metros cuadrados ubicados en suelo industrial o de uso terciario. La compañía estima su rentabilidad ente el 8%, y el 10% dependiendo de la ubicación de la estación y una recuperación de la inversión cercana a los dos años.