Cada vez hay más motos circulando por las calles; así lo corrobora la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (ANESDOR) que asegura que se vivió un crecimiento de ventas del 14% en el primer semestre de este año (crecimiento del 15% en motocicletas, del 11% en quads, ATVs, etc. y del 2% en ciclomotores).

Un motero o motera que tenga hijos o un hobby algo aparatoso también requiere de coche. Esta duplicidad, si bien es práctica, puede resultar engorrosa a la hora de buscar aparcamiento; si uno no quiere dejar su moto en la calle, ¿significa que debe adquirir o alquilar dos plazas de aparcamiento?

De este dilema nace GarageLift, una herramienta diseñada, desarrollada y producida en España. Nacida en 2016, aunque con varios años trabajando en la creación del producto, permite solucionar los problemas de espacio y permite realizar labores de mantenimiento y limpieza. Con una capacidad de 400kg y 1,20 metros de elevación, eleva cualquier motocicleta para que se pueda estacionar encima del coche, ahorrando así espacio en la plaza del parking. Existen diferentes accesorios para aquellas motos que requieran de alguna especificación en concreto debido a su tamaño, peso, etc.

Compatible con todos los modelos, los diseñadores han creado una solución completamente segura que cumple con todos los requisitos de la UE y adaptable a todo tipo de garajes. Pero GarageLift no sólo sirve para ahorrar espacio: también es un añadido a la seguridad de la moto. Para empezar, el hecho de tenerla guardada en un parking, en lugar de en la calle, ya disminuye las posibilidades de robo, que son realmente altas. En Barcelona, se roba una media de 9 motos al día.

Además, al estar elevada también se hace más difícil robar la moto o alguna de sus piezas, característica que GarageLift refuerza con ocho sistemas de seguridad: candado de seguridad, corte de fin de carrera, pines para el descanso del motor, pestillos anticaídas, pestañas antipivotantes, cepo de seguridad y anclaje, seguro de bloqueo de rueda, cincha de sujeción y anclaje al suelo o pared. Además, GarageLift es personalizable en colores.

Todo ello protege la moto de los ladrones, pero también de los otros vehículos con los que comparte parking, aislándola así de posibles golpes y rasguños. Además, la altura es ideal para realizar un correcto mantenimiento y limpieza, por lo que la moto no sólo estará bien aparcada y segura, sino que lucirá mejor.

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