Una de las funciones más importantes que tiene que cumplir un empleado de tiendas de ropa es la del control de stock, ya que de esta manera sabrá perfectamente qué tipo de mercadería existe en el negocio, cuál habrá que reponer y qué es lo que tiene exactamente para poder ofrecerle a sus clientes. Pero además de toda esta información recopilada, conocer nuestro stock también puede servirnos para plantear algunas estrategias nuevas de ventas, ya que por lo general a través del mismo podemos darnos cuenta a la perfección qué tipo de prendas no han tenido tanto éxito en la temporada. En algunos casos el stock es una cuestión de azar respecto a talles que más han salido o no; y en otros nos puede ofrecer todo un esquema o la información de lo que la gente está necesitando o del interés y requisitos de la misma.

Pero además, en cualquier tipo de negocio dedicado a la venta de un producto en particular o de toda una variedad de los mismos, el stock es una forma de organizarnos y de estudiar el crecimiento de las ventas a través de un lapso determinado. Esto no sólo ayuda al comerciante a poder organizarse o plantearse errores que ha cometido en este tiempo, sino también saber con exactitud la cantidad de productos, prendas o artículos que tendrá que encargar para tener siempre la mercadería que el cliente necesita.

En lo que respecta a los negocios dedicados a la vestimenta, cualquier programa de ropa es capaz de ofrecernos tal información, pero lo mejor es informarse como corresponde antes de elegirlo.