La crisis económica y los cambios en la legislación fiscal española han tenido efectos muy negativos sobre diferentes sectores de la economía. En el caso de las peluquerías, las consecuencias han resultado altamente negativas, reduciéndose el negocio en casi un 35% según los datos del Observatorio del Mercado Profesional de la Peluquería en España.

Según el informe, existen bastantes puntos calientes en el sector, como la abundancia del autoempleo o la proliferación de cadenas lowcost. Esto ha provocado muchísimos cambios en las peluquerías en Barcelona con sus precios, o en Madrid, Sevilla o cualquier otra ciudad de la geografía española.

No se debe pasar por alto que este segmento de actividad ha tenido que asumir una notable subida en el Impuesto sobre el Valor Añadido de 13 puntos desde septiembre de 2012, lo que ha provocado un lógico retroceso y disminución en el volumen de negocio.

De esta manera, si en el curso 2011 (el inmediatamente anterior a la subida del IVA) el montante total se estimaba en unos 5.000 millones de euros anuales, el 2015 se cerró con un volumen de negocio de 3.300 millones, lo que supone una reducción del mismo del 34%.

Son muchas las razones que obligan a las peluquerías en Barcelona a bajar precios. Según el estudio hecho público por el Observatorio del Mercado Profesional de la Peluquería en España el principal, junto al IVA, es la proliferación de cadenas low cost que han creado una competencia feroz en el sector.

Actualmente son más de 13.000 los salones de este tipo que hay en territorio nacional consiguiendo una cuota de mercado del 11,5%, mientras que las peluquerías clásicas superan los 20.000 y su volumen de negocio es del 35%. Junto con ellos, boutiques altamente especializadas con un 3,5%.

El resto es para lo que se conoce como autoempleo, que ha experimentado un aumento considerable en los últimos años, estimándose en 15.000 personas las que se dedican a esta actividad por cuenta propia. En total, esta alternativa acumula un 30% del volumen total en el país.

Como se ha comprobado gracias al estudio elaborado por Stanpa y Key-Stone para el Observatorio del Mercado Profesional de la Peluquería en España, el sector no pasa por el mejor momento, con una clara caída de los salones tradicionales desde la entrada en vigor del aumento del IVA. Además, hay que destacar otro factor importante y relacionado con la crisis vivida en los últimos años: cada español se gasta un 18% menos al año en estos negocios.

Para evitar esta caída, muchos salones en Barcelona han cambiado sus precios, adaptándolos a la competencia y haciéndose cargo de gran parte de la subida impositiva.