El sector de clínicas dentales y estéticas continúa experimentando un crecimiento en España en 2022. Esta evolución se debe a la creciente preocupación de la población por la estética y la salud dental, sobre todo, tras la pandemia. Si a este creciente interés se le suma el continuo desarrollo de nuevas tecnologías, de novedosos tratamientos y de las múltiples ofertas que ofrecen las distintas clínicas, el crecimiento de la demanda es más que notable. Esto ha favorecido aún más la proliferación de centros de este tipo tras varios años de expansión. En España existen 6.305 clínicas sanitarias a fecha de 2021 autorizados por el Ministerio de Sanidad para ejercer la Medicina Estética, según datos de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME); mientras que el número de clínicas dentales que operan en nuestro país es de 23.559, según cifras del Registro General de centros, servicios y establecimientos sanitarios (REGCESS). Las clínicas dentales siempre se han visto como un buen negocio. Eso ha incentivado la incorporación al mercado de cada vez más franquicias, así como la apertura de nuevas clínicas independientes. Sin embargo, con tanta oferta, los pacientes tienen muchas más opciones para elegir y eso ha hecho perder cartera de pacientes históricos y ha reducido la efectividad de la clásica recomendación